LA RESACA DEMOCRÁTICA

Focus: Economía
Fecha: 04/12/2007

En otra ocasión hice una referencia a Alain Minc y su discurso sobre la “borrachera democrática”.

Ese carnaval al que Minc se refería, en el que los representantes del pueblo se inquietan frente a los jueces estrella, se angustian con los medios y se obsesionan por los sondeos demoscópicos, ha llegado a su fin.

Ahora nos queda la resaca, aunque, ante cualquier consulta electoral, volverá el pandemonium de los gestos y las palabras huecas.

Ya sabemos que la democracia es el menos malo de los sistemas de gobierno, lo cual no asegura su calidad. No olvidemos que Hitler fue elegido democráticamente.

Sobre el binomio “democracia / libertad”, Benjamín Franklin solía contar una metáfora: “La democracia son dos lobos y una oveja que votan sobre qué cenarán. La libertad es la oveja, debidamente armada, que impugna el resultado”.

La democracia, en muchas ocasiones, es secuestrada por los partidos políticos, que cercenan el natural papel de los ciudadanos y la expresión política de sus deberes y derechos.

La democracia representativa está en crisis y tiene que hacer autocrítica si no quiere quedar esclerotizada por sus propios aparatos.

El sábado, primero de diciembre, hubo en Barcelona una explosión de “democracia directa”, de la genuina, de la auténtica, de la que recupera ese concepto de “libertad” al que tan sabiamente se refirió Benjamín Franklin.

Poco importa que la “santísima trinidad” (jueces, medios de comunicación y sondeos) traten de desfigurar la realidad objetiva.

Como buena muestra de su voluntad manipuladora, sólo bastó escuchar a los “opinadores tertulianos” del matinal dominguero de la Ser o leer la editorial de “El País” del lunes tres de enero. En ambos casos, para vomitar. Ya lo dijo el maestro Pla, y debemos recordarlo a los desmemoriados: “Lo que más se parece a un español de derechas es un español de izquierdas”.

No importa. Basta ya de monsergas. Nosotros estuvimos allí y decidiremos en consecuencia.
Alf Duran Corner

 

« volver