MI AMIGO TONY BLAIR
Focus: Política
Fecha: 11/05/2000
Hasta hace poco a este chico le había salido todo
demasiado bien. Azares de la vida lo habían situado a la
cabeza de un partido histórico que llevaba muchos años sin
gobernar. La gente estaba ya cansada de un thatcherismo sin
Thatcher y dispuesta al cambio.
Tenía y tiene un aire apuesto y simpático, se comunica bien,
se ajusta al modelo familiar de la clase media británica, es
convencional, se lleva bien con casi todo el mundo.
Encontró buenos ideólogos conectados con la simbología de la
modernidad. Se inventó lo de la "tercera vía", vendió el
concepto vía simplificaciones generales, ganó las elecciones y
se puso a gobernar.
Ha mantenido línea directa con Clinton, es decir con su "primo
americano", no ha jugado a la carta del Euro sin importarle
mucho la revaluación de la libra en un país en el que prima el
sector terciario, ha empujado grandes proyectos de inversión,
ha apostado por la educación pública.
Pero le ha salido un grano en la elección del alcalde de
Londres, un puesto que Margaret Thatcher abolió en y
que la mayoría laborista ha vuelto a instituir.
El partido había planificado la elección para que saliera Frank
Dobson, pero el rojo Ken Livingstone les ha aguado la fiesta
presentándose como independiente. Livingstone, un viejo
militante laborista que ya había sido alcalde, fue suspendido
de militancia por mantener su candidatura, pero el pueblo de
Londres le ha expresado su apoyo.
Lo relevante no es que Livingstone pertenezca a la ala
izquierda de un partido que viste traje "light". Lo
auténticamente importante es que, una vez más, el aparato
de un partido ha fracasado en su proyecto de imponer sus
condiciones a unos electores con criterio propio.
Lo de las "listas cerradas" es una estafa a la democracia.
Lo siento por mi amigo Tony Blair !
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