UNOS MALOS PRESUPUESTOS

Focus: Economía
Fecha: 27/04/2012

El proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para el 2012 ya ha sido presentado. El tacticismo político (las elecciones andaluzas) ha retardado la presentación. Se aprobarán a la búlgara, por el rodillo de la mayoría absoluta del PP. Que algunos otros partidos lo apoyen o no, no es relevante.

Lo único a señalar es que son unos malos presupuestos. Me recuerdan los presupuestos hechos por los contables de algunas empresas en los “milagrosos” años sesenta. Cuadraban, como no podía ser menos, pero eran una chapuza.

No se van a cumplir ninguno de los objetivos. El que menos es del Déficit Público (5,3%). Tampoco el de la Deuda (79,8%). El consumo caerá más de lo que estiman (4,4%) y el paro llegará probablemente a los seis millones.

Y es que estos presupuestos no han pasado un test de coherencia. Veamos los ingresos y los gastos en sus partidas más importantes. Los ingresos dependen de la actividad económica. Y la actividad económica seguirá ralentizándose. Bajarán las cotizaciones sociales (cuota empleado, cuota empresa), bajarán los impuestos indirectos, se mantendrán los directos y poca cosa más. Para que estas partidas suban (y mejoren los ingresos) hay que desarrollar políticas de estímulo de la oferta y la demanda. Y éstas no existen.

En cuanto a los gastos, los más importantes son de obligado cumplimiento: pensiones, subsidio de paro, gastos sociales. Si añadimos el coste de la Deuda, nos llevamos el gran bocado. Si además revisamos otras partidas, vemos que sigue a piñón fijo su megalómana política de infraestructuras (los nunca rentables trenes de alta velocidad para pasajeros ociosos) y olvidan aquellas inversiones productivas (accesos ferroviarios al puerto de Barcelona, red de ancho europeo para trenes de mercancías en el corredor mediterráneo etc.), que el sentido común recomienda, máxime cuando tenemos problemas de caja. Si han leído a Keynes, cosa que dudo, no han entendido nada.

Cuando vean que pierden el tren (es una metáfora) se les puede ocurrir bajar las pensiones y reducir el subsidio y el plazo del paro. También pueden subir el IVA. El Estado español es un laboratorio en manos de una pandilla de incompetentes.

Quizás el problema reside en que los PGE los confeccionan funcionarios públicos, como el propio señor Rajoy (registrador de la propiedad), la señora Sáenz de Santamaría (abogada del Estado), el señor de Guindos (técnico comercial del Estado), el señor Montoro (catedrático en excedencia), la señora Pastor (funcionaria del cuerpo superior de salud pública) y sus calificados ayudantes.

En una empresa, los presupuestos los preparan los directivos, los someten a la aprobación del consejo de administración, y estos los aprueban o no, en la medida en que cumplen los objetivos que los accionistas han fijado. El dinero es privado y hay que dar cuentas de su uso.

En el Estado el dinero es público y no hay que dar cuentas a nadie, al menos hasta que no lleguen las próximas elecciones. Y así nos va.

Alf Duran Corner

 

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