BLACK HAWK DERRIBADO

Focus: Política
Fecha: 31/08/2007

Falta más de un año para las elecciones presidenciales norteamericanas, pero los “equipos profesionales” de los candidatos están ya haciendo su trabajo previo.

En Usa no se puede hablar propiamente de “militancia” política, en el sentido europeo del término. Las dos grandes opciones de gobierno (demócratas y republicanos) son dos lecturas empresariales de la “cosa pública”. Trasladados a nuestro espacio, los primeros cabalgan entre el centro y la derecha, mientras los segundos se escoran hacia la extrema derecha.

En España, Clinton hubiera podido ser de la UCD. Ni que decir tiene que Bush, Chenney y Rumsfeld serían miembros de pleno derecho del Partido Popular.

Con este panorama, es interesante analizar las propuestas que los líderes actuales ponen sobre la mesa.

Me centraré en los demócratas, pues los republicanos permanecen callados para reducir el eco de su controvertido Presidente.

Los tres personajes más interesantes de este colectivo son John Edwards, Hillary Clinton y Barack Obama.

Edwards y Obama han puesto el acento en temas sociales (asistencia sanitaria, educación, pensiones, etc.), en tanto la segunda ha enfatizado “su” capacidad personal para manejar el barco. Es decir, los “chicos” se preocupan de la “demanda” y su oponente femenino de la “oferta”.

Pero como en Estados Unidos se hacen sondeos a diario, los analistas han señalado que la mejor puntuación de la “chica” frente a sus contrincantes se debe a presentarse como una “dura”. Y es que para los norteamericanos, el “sheriff” es todavía una figura mítica.

Quizás por esto, las últimas declaraciones del trío son explosivas. Los términos “maquinaria militar”, “capacidad nuclear”, “presupuestos de guerra”, “fuerza de disuasión” se usan con alegría. Son términos habituales en el entorno de Bush (probablemente el peor presidente que ha tenido América en toda su historia).

La simbología del “Halcón” vuelve a dominar el panorama político, aunque conviene recordar que muchos halcones han sido derribados y no sólo en las películas bélicas.

Si todo sigue igual, estamos apañados.
Alf Duran Corner

 

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