BOLEROS
Focus: Política
Fecha: 10/02/2006
Posee la propiedad de la mayoría de los medios privados de comunicación y controla con dureza los medios públicos.
Lleva ya tiempo en campaña y está presente en todos los debates. Es un tipo divertido y espabilado que sabe llegar a la gente practicando un populismo vulgar, en el que muchos italianos se ven reflejados. Incluso sus críticos reconocen que algunas de sus ocurrencias les hacen reír.
El problema es que es el primer ministro de un país importante de la Unión Europea. El problema es que su meteórica carrera está plagada de incidencias judiciales. El problema es que durante la última etapa de su gestión gubernamental, el país se ha situado en la cola en términos de deuda y ocupa el puesto 47 en el “índice de competitividad global” de Davos 2.006.
A él particularmente las cosas no le han ido tan mal, ya que Forbes estima que su fortuna personal ha crecido en 4.000 millones de dólares durante el mismo período de tiempo.
La alternativa política a Berlusconi es una coalición de partidos de centro-izquierda, liderada por el profesor Romano Prodi, un hombre culto e inteligente pero con poco tirón.
Silvio Berlusconi, que empezó su carrera profesional como animador y cantante en trasatlánticos de lujo, podría presentarse en “gran hermano” u “operación triunfo”. E incluso ganar.
Le encanta declarar públicamente que acostumbra a componer sus canciones en la cocina de su casa. Pronto saldrá un disco suyo, junto al exaparcacoches Mariano Apicella, con títulos como “Intento olvidarte” y “Con el corazón en la garganta”.
Hay que ser optimista, pero debemos reconocer con el máximo cariño que este mundo nuestro no tiene remedio.
