ES LA ECONOMIA, ESTÚPIDO

Focus: Sociedad
Fecha: 03/09/2010

La señora Chacón (doña Carmen) y el señor González (don Felipe) – en la corte madrileña si no eres “don” o “doña” no eres nadie – publicaron un artículo a página entera en El País – uno de los periódicos del “régimen” – (el otro es El Mundo), en el que exhortaban a catalanes y españoles a trabajar unidos por el bien de la España diversa y plural.

La firma conjunta tenía un valor simbólico: el maridaje espurio entre el PSOE y el PSC. El señor González debería recordar – como recordamos algunos resistentes – que en los años 50 y 60 del pasado siglo no había en Catalunya un solo socialista militante en el frente antifranquista y que el PSC nació en 1978, ya muerto el dictador, de tres corrientes de nuevo cuño: Moviment Socialista de Catalunya – el partido socialista del Paseo de la Bonanova, formado por un pequeño grupo de burgueses desclasados - , Reagrupament Socialista i Democràtic de Catalunya, creado por Josep Pallach (el gran líder del socialismo catalán, muerto prematuramente), y la Federación Catalana del PSOE, integrada por unos pocos sindicalistas de la UGT. A estas corrientes se añadieron algunos independientes. En Catalunya, el único partido político antifranquista era el PSUC. Era simplemente “el partido”. El resto no existía.

El PSC, como el PSOE, contó con el apoyo de los lobbies occidentales (que temían una repetición del modelo italiano) y fue por esto que consiguió una gran cuota de mercado en las primeras elecciones democráticas. Era una izquierda “posibilista” y “civilizada”.

De todo esto, la señora Chacón no recuerda nada, pues apenas tenía siete años. Se lo habrán contado mal.

He hecho este preámbulo, porque lo considero necesario para responder a la última encíclica de la izquierda españolista.

El discurso de la señora Chacón y el señor González tiene tres líneas de pensamiento: nos hemos de seguir queriendo (el Bolero de Ravel), la “minoría estridente de catalanes” independentistas, y “el grosero cálculo económico”.

Sobre lo primero y lo segundo pasaré rápidamente. Creo que las querencias tienen su espacio en los programas rosa de las televisiones basura y no merecen respuesta. En cuanto a la minoría estridente, recuerdo al señor González que la representan personas como el doctor Broggi, el doctor Badía i Margarit, el doctor Bassols, el decano Cardús, la decana Paluzie, el notario López Tena y un largo etcétera de viejos rockeros.

En cuanto a lo tercero – que es lo mío – me permito indicarles que los cálculos económicos nunca son groseros. Son y basta.

A Catalunya no le interesa formar parte del Estado español. Debe constituirse en estado independiente, pues su viabilidad económica está asegurada. Y Catalunya son los catalanes, cualquiera que sea su lengua vehicular. No es un problema de esencias, sino de sentido común. Hace ya unos días que publiqué un razonado argumentario – resumen de una conferencia pronunciada también hace poco – en el que desarrollo con precisión este tema. Puede consultarse en “Lectura seleccionada”.

La señora Chacón y el señor González son de “letras” y están mal informados. Deberían reciclarse.

Alf Duran Corner

 

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