LA NORIA

Focus: Economía
Fecha: 10/07/2009

En este caso nos referimos a la noria de la economía, que no para de girar, pero no en el sentido deseado. La identificación de unos supuestos “brotes verdes” (señales de mejora en ciertos indicadores) tiene escaso rigor analítico. La alegría del verano hace confundir los deseos con las realidades. Tendremos que continuar la purga, que desgraciadamente siempre toca a los mismos.

Teniendo en cuenta el peso del factor turismo en el PIB español y la estacionalidad del tercer trimestre del año, es lógico que la caída del empleo pierda algo de velocidad. Los estímulos fiscales para la compra de vehículos (turismos y motos) pueden incrementar ligeramente la demanda y reducir un poco los stocks de producto acabado, pero las plantas industriales han de frenar la producción. El último trimestre del 2009 va a ser muy duro, en todos los sentidos.

El euro sigue fuerte y esto limita las exportaciones, con el añadido de que los mercados tradicionales de nuestros productos están también en fase recesiva.

Por último tenemos a los bancos y cajas, que son algo así como “el padre de todas nuestras desdichas”. Su afán de codicia nos ha llevado al desastre y tras la intervención masiva de los poderes públicos (que se han endeudado a largo plazo para que el sistema no quebrara) continúan con su opacidad operativa.

El Fondo Monetario Internacional estima que las pérdidas totales del sector suman casi tres billones (europeos) de euros (cuatro trillones de dólares), de los que sólo han aflorado hasta la fecha la mitad. El resto de esos activos siguen en sus balances, pero no tienen valor y deberán limpiarse con el tiempo.

¿Y, por qué bancos y cajas no trasladan las fuertes inyecciones de liquidez de los Bancos Centrales al mercado de empresas y particulares? Porque no les interesa. El Banco Central Europeo les suministra dinero al 1% y con este dinero ellos compran bonos de cualquier estado europeo solvente al 4 ó 5%. En esta situación de debilidad, prefieren “esperar y ver” y no arriesgarse prestando dinero al mercado. Y cuando lo prestan, se cubren las espaldas con intereses de usura.

Claro que la gente está distraída con los fichajes del señor Pérez. Hay que estar muy tocado para acudir a un estadio de fútbol con el único propósito de ver a unos señores en camiseta y calzoncillos, que todavía no han ganado nada.

Esto es lo que hay. Peor es la cocaína.
Alf Duran Corner

 

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