LA SOCIALIZACIÓN DE LAS FINANZAS
Focus: Economía
Fecha: 15/05/2009
W
illem Buiter, antiguo miembro del comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra, y persona de talante e ideología conservadores, ha propuesto recientemente la socialización del sistema financiero. Es decir, que pase en su totalidad al Estado. A su juicio, es la única forma de salir de la crisis y encarar el futuro.
En la práctica, las recomendaciones del señor
Buiter han sido parcialmente seguidas por el
Premier británico señor
Gordon Brown. Sin embargo, mientras que el señor
Brown ha puesto dinero público para salvar negocios privados, el señor
Buiter considera que “lo privado” ha sido el causante principal de la actual crisis económico-financiera y que ha agotado su papel.
El señor
Buiter considera que el dinero es un bien público, aunque circule por manos privadas, y que su gestión global y su control es responsabilidad de la Administración Pública, nacional e internacional.
Resulta interesante comprobar que la opinión de este reputado experto coincide con la de
Karl Marx, uno de los padres fundadores de la ciencia económica.
Marx, un burgués ilustrado que pudo desarrollar buena parte de su trabajo de investigación gracias a la ayuda de su amigo
Friedrich Engels (otro burgués ilustrado, hijo de un poderoso industrial), predijo la evolución del
capitalismo y las razones que lo llevarían a su autoliquidación.
Para
Marx el fracaso se hallaba incorporado en las propias contradicciones del sistema, en su desmedido afán de crecimiento, en la constante mejora de los instrumentos de producción, en el proceso acumulativo del excedente económico, en el desajuste entre la oferta y la demanda, en las propias relaciones de producción.
Quizás por todo esto, los editores alemanes de
“Das Kapital” (el más importante trabajo de
Marx sobre el capitalismo) están sorprendidos ante el éxito actual de sus constantes reediciones. Máxime si tenemos en cuenta que este documentado libro no es un panfleto revolucionario sino un tratado complejo y muy técnico sobre la ciencia económica.
La figura de
Marx se agranda cada día, en tanto que la de sus numerosos e ignorantes detractores se pierde por las cloacas de la historia.
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