OTRO ERROR DE CONCEPTO
Focus: Sociedad
Fecha: 27/07/2007
Lo cierto es que la “burbuja occidental” , el lugar privilegiado en el que aspiran a vivir todos los desheredados de la tierra, tiene también su “patio de atrás” , donde afloran sus vergüenzas.
Somos una sociedad que combina ciertos avances tecnológicos (muchos de ellos de escasa utilidad) con grandes precariedades. Que la caída de un cable de alta tensión paralice una gran metrópoli es una muestra de nuestro grado de dependencia.
Y todo no se arregla con invertir más en infraestructuras (en este caso, la red eléctrica) sino en analizar otras alternativas.
Hace tiempo dejé escrito que “estamos sodomizados por el PIB”, por lo que conviene reflexionar antes de pasar a la acción.
Hemos de plantearnos seriamente si las fuentes de energía que utilizamos son las más adecuadas, si es cierto que son eficientes, si las energías renovables son muy caras, si no estamos atrapados por los intereses económicos de algunos núcleos de poder.
Por ejemplo en Estados Unidos, los investigadores del New Jersey Institute of Technology, bajo la dirección del profesor Somenath Mitra, catedrático de química y ciencias medioambientales, han desarrollado unas células solares de bajo coste, que pueden ser pintadas o impresas sobre hojas flexibles de plástico.
Los consumidores, indica el profesor, podrán extender el producto terminado sobre una pared o un tejado, y crear su propia fuente de energía. Para Mitra, recoger la energía directamente de la abundante radiación solar es la estrategia clave del futuro energético del mundo.
Hasta el momento en las opciones solares se utiliza silicona purificada, cuyo proceso de fabricación sólo queda al alcance de grandes inversores. Sin embargo, el nuevo proyecto utiliza polímeros para desarrollar células orgánicas solares, y en este caso la producción es simple y barata.
Mitra concluye: “Imagine que algún día conducirá un coche híbrido, con un panel solar pintado en el techo, que producirá la energía que el coche necesita. Las oportunidades son infinitas”.
Un poco de imaginación, por favor.
