QUE SIGA LA FIESTA
Focus: Política
Fecha: 02/09/2001
Este fin de semana se inicia en Durban, Africa del Sur, una conferencia internacional contra la discriminación y la intolerancia. Precisamente en Africa del Sur, que durante muchos años fue ejemplo por excelencia de los execrables comportamientos de la minoría blanca contra la mayoría negra.
En Africa del Sur continúa habiendo racismo, aunque no es políticamente correcto defenderlo en público. Las cosas no han cambiado tanto. El poder, la riqueza y los privilegios siguen en manos de una minoría que apenas representa el uno por ciento de la población. Hay algún mendigo blanco, pero es la anécdota de una realidad violenta y miserable.
Más de dos mil delegados procedentes de países, entre los que se encuentran treinta jefes de Estado y cerca de cien ministros, se van a reunir, discutirán, harán propuestas, tomarán sus copas y luego regresarán a sus lugares de origen con un dossier repleto de ponencias.
Entretanto los sionistas del Sr. Sharon continuarán masacrando a la población palestina, como en un pim-pam-pum de un aquelarre macabro. El Sr. Bush y su socio el Sr. Blair seguirán sus bombardeos de castigo sobre parte del territorio soberano de Irak y en las playas de Tarifa los surfistas harán apuestas sobre el número de inmigrantes ahogados.
En el supuesto de que alguna ONG presente una alternativa razonable en la conferencia, el gobierno de Estados Unidos boicoteará el proyecto, como ya lo hizo en las dos precedentes de y .
A no ser que se plantee como un safari social, lo de Durban es perder el tiempo.
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