Hay una enseñanza familiar que me ha sido de gran utilidad: “La adversidad hay que tomarla sólo con dos dedos...
Hay una enseñanza familiar que me ha sido de gran utilidad: “La adversidad hay que tomarla sólo con dos dedos, la felicidad hay que recibirla con las dos manos abiertas”, aprendiendo a gozar plenamente de ella.
Un dicho popular dice que “la cara es el espejo del alma”, y en efecto la expresión facial suele revelar el estado emocional, alegre o triste, de las personas. Puede haber una “comunicación sin palabras”, basada en la expresión de la cara. Lo contrario también es factible, aunque sea mucho menos satisfactorio, como ocurre en las conversaciones telefónicas en las que no se ve al interlocutor. En cabinas especiales existen equipos de sonido y pequeñas pantallas de televisión, lo que es mucho más agradable.
Lo que quizás sea sorprendente es que existe una importante retroalimentación de la propia expresión facial. Todos los músculos tienen unos sensores en forma de huso que informan al sistema nervioso central del grado de tensión muscular, lo que es esencial para la coordinación de movimientos. Los músculos de la cara son particularmente ricos en estos sensores que proporcionan al cerebro un conjunto de fórmulas de tensión diferencial, que se corresponde con los estados emocionales expresados en la cara. Es decir, que las
estructuras cerebrales aprenden a correlacionar las fórmulas de tensiones faciales con los estados emocionales. Este hecho fisiológico es de gran importancia, porque nos permite modular las percepciones emocionales, simplemente cambiando voluntariamente la expresión facial. La demostración experimental es fácil de realizar: ponga el lector una cara plácida, tranquila y relajada (no una mueca forzada, sino una expresión alegre), y verá cómo siente por dentro una especie de felicidad. Lo contrario también es posible, puesto que poniendo una cara triste y preocupada se producen percepciones desagradables.
Fuente: La felicidad. José M.R.Delgado. Ediciones Temas de Hoy. Madrid. 1999.
« volver